La remodelación de esta vivienda representó un gran reto de diseño porque, durante el paso de los años, había sufrido diversas modificaciones en detrimento de la condición original. Todos los elementos estaban en mal estado y la cubierta había sido sustituida por una techumbre de perfiles de acero y paneles de aglomerado que dificultaba la habitabilidad.
El trabajo consistió en devolver la esencia de la casa utilizando vigas de madera, que era el sistema constructivo inicial. También se respetaron los muros originales debido a que la casa, presumiblemente de 1930, no contaba con refuerzos verticales de concreto. Se adaptó la vivienda para las necesidades de habitación contemporáneos y se aumentó un nuevo volumen en el tercer nivel para poder utilizar la cubierta como una terraza.